La esquila es el proceso por el cual se corta y separa el vellón o conjunto total de fibra que cubre a la alpaca. Entre los vellones, tenemos el manto que es la fibra que se encuentra en el lomo y los flancos; y las bragas, en la región pectoral, extremidades y cabeza.
Lo recomendable es que la esquila, llevada a cabo entre octubre y noviembre aprovechando la temperatura cálida y las primeras lluvias que propician el pasto fresco, sea anual ya que en un año el vellón supera los 7 cm requeridos por la industria textil; además, debe considerarse que el crecimiento bianual de la fibra logra su 65% al primer año.
Dentro de la cadena de valor de la alpaca, la esquila constituye un proceso con importante incidencia ya que de ella depende la posibilidad de extraer fibras de distinta calidad y, con ello, ya no ofrecer un precio único sino negociar distintos y mejores precios.
ANTES
- Agrupar las alpacas por razas, edad y tamaño de fibra.
- Acondicionar un galpón o espacio limpio con una playa de esquila especial, caso contrario, usar mantas de lona, yute o plástico para recoger la fibra. Debe evitarse el contacto del vellón con la tierra o cualquier suciedad.
- Secar y limpiar al animal.
- Usando trabas, mancornas o soguillas, colocar al animal de tal manera que facilite la clasificación del vellón y evitándole el máximo de incomodidad.
DURANTES
- Usar máquinas de esquila o tijeras y peinetas desinfectadas y con filo.
- Aplicar un corte uniforme y una longitud de mecha comercialmente aceptable. Evitar el doble corte del vellón porque afecta el rendimiento del animal.
- Empezar por el pecho hacia la espalda incluyendo el lado derecho del cuello. Una vez que se acaba, dar vuelta al animal y repetir por el lado izquierdo.
- A las alpacas preñadas esquilar con mucho cuidado, el susto puede producir un aborto. No hacerlo en casos de gestación avanzada.
- Debe preverse una técnica para no dañar al animal pero en caso de cortarlo accidentalmente, aplicar inmediatamente yodo en la herida.
DESPUES
- Trasladar lo esquilado a un lugar limpio.
- Limpiar del contorno los pelos gruesos.
- Evitar que las puntas de las fibras se quemen con la radiación solar.
- Clasificar la lana del vellón extraída por edad, región del cuerpo y color.
- Pesar y registrar el vellón en una ficha registro
- Envolver el vellón en forma de tambor de tal forma que la parte interior o flor quede al interior de la envoltura.
- Embalar el vellón en sacos de yute.